Si el local donde está mi negocio es de alquiler ¿puedo traspasarlo igualmente?
Cuando se emprende un negocio, el lugar donde se establece desempeña un papel fundamental en su éxito. Muchos empresarios optan por alquilar un local comercial para iniciar sus actividades, ya que puede ser una opción más accesible y flexible en comparación con la compra de una propiedad. Sin embargo, surge una pregunta común entre los que alquilan un local:
¿Es posible traspasar un negocio que está en régimen de alquiler?
En este artículo, exploraremos esta cuestión y analizaremos los factores clave a considerar al traspasar un negocio alquilado.
¿Qué es un traspaso de negocio?
Antes de abordar la pregunta principal, es importante comprender qué implica exactamente un traspaso de negocio. El traspaso de negocio es el proceso mediante el cual un empresario cede su negocio, incluyendo sus activos, contratos y clientela, a un tercero interesado. En este caso, el traspaso se refiere específicamente a un negocio que se encuentra en un local comercial alquilado.
Regulación de los traspasos de clínicas y laboratorios dentales
Los traspasos de negocios en locales en los que se ejerza una actividad empresarial o profesional vienen regulados por el artículo 32 de la Ley de Arrendamientos Urbanos (Ley 29/94 de 24 noviembre de 2004), que permite ceder el contrato de arrendamiento, sin necesidad de contar con el consentimiento del propietario.
No obstante, el propietario tiene el derecho a elevar la renta un 20%, estableciéndose un plazo de un mes para que el nuevo inquilino notifique formalmente (burofax) al propietario el acuerdo de traspaso.
Por lo tanto, bastaría el acuerdo entre las partes, aunque hay que tener cuidado porque, en algunas ocasiones, los contratos de arrendamiento incluyen una cláusula que prohíbe la cesión o traspaso, y otras veces los propietarios reclaman un porcentaje, algo a lo que no tienen derecho. Siempre es conveniente revisar el contrato con un abogado.
Las 3 claves para traspasar un negocio alquilado
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- Revisión del contrato de alquiler. El primer paso crucial antes de considerar el traspaso de un negocio alquilado es revisar detenidamente el contrato de arrendamiento. Algunos contratos de alquiler pueden contener cláusulas explícitas que prohíben o restringen la posibilidad de traspasar el negocio sin el consentimiento del arrendador. Estas cláusulas suelen estar diseñadas para proteger los intereses del propietario del inmueble y mantener el control sobre los inquilinos. Por lo tanto, si deseas traspasar tu negocio, debes asegurarte de cumplir con cualquier requisito estipulado en el contrato de arrendamiento.
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- Obtención del consentimiento del arrendador. Si el contrato de alquiler no prohíbe el traspaso o establece condiciones específicas para llevarlo a cabo, el siguiente paso es obtener el consentimiento del arrendador. Es fundamental comunicarte con el propietario de manera clara y transparente sobre tus intenciones de traspasar el negocio. Proporcionar información sobre el nuevo inquilino propuesto, su capacidad financiera y su experiencia empresarial puede ayudar a generar confianza y facilitar el proceso de obtención del consentimiento.
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- Renegociación el contrato de arrendamiento: En algunos casos, el traspaso de un negocio puede implicar la renegociación del contrato de arrendamiento existente. Esto puede ser necesario si el nuevo inquilino desea realizar modificaciones en el local o si se necesita ajustar las condiciones económicas del contrato. En tales situaciones, es fundamental contar con el apoyo de un profesional legal para asegurarte de que tus derechos e intereses estén protegidos durante el proceso de renegociación.
Traspasar un negocio alquilado es una opción viable
Para alcanzar tu objetivo es esencial que comprendas y cumplas con las disposiciones del contrato de arrendamiento y obtener el consentimiento del arrendador. Si tienes dudas, contáctanos. Podemos ayudarte con asesoramiento de profesionales legales y financieros para garantizar que todos los aspectos se manejen adecuadamente.
